Fundada en 1964 en Barcelona por José Batlló y Amelía Romero, la colección de poesía El Bardo llegó a conformar uno de los catálogos poéticos más relevantes de nuestro país, no solo por su calidad intrínseca sino también por su impronta sociocultural. Con cerca de cien títulos en su haber, la esforzada labor de Batlló (como director de la colección) y de Romero (como editora) sirvió para dar voz a algunos de los poetas más interesantes del momento, especialmente entre la joven poesía española, sin importar si estaba escrita en castellano, catalán, galega o euskera, padeciendo por el camino, muchas veces, la dureza de la censura franquista. La colección El Bardo se especializó igualmente en la elaboración de sonadas antologías poéticas, alrededor de las cuales se fue forjando una suerte de canon renovador dentro de la poesía española. Como poeta, el propio Batlló publicó entonces diversos poemarios de interés. En paralelo, promovieron la creación de varias revistas de poesía, actuando Batlló como corresponsal en España de otras tantas realizadas en el extranjero. La conexión de El Bardo con Europa y L