La gran crisis financiera tuvo efectos catastróficos en la economía global y tomó completamente por sorpresa a los economistas convencionales. Muchos comentaristas destacados declararon poco antes de la crisis que se había encontrado la receta mágica para la estabilidad eterna. Menos de un año después, se produjo la mayor crisis económica desde que estalló la Gran Depresión. En este libro explosivo, Steve Keen, uno de los pocos economistas que anticipó el colapso, muestra por qué los autodeclarados expertos estaban equivocados y cómo los niveles cada vez mayores de deuda privada hacen que otra crisis financiera sea casi inevitable a menos que los políticos aborden la dinámica real que causa inestabilidad financiera. También identifica las economías que se han convertido en ‘Los muertos vivientes de la deuda' y las que están a continuación, incluidas Australia, Bélgica, China, Canadá y Corea del Sur.