A sus trece años, su día a día cambia por completo al conocer al atractivo Richard Abbott, su futuro padrastro, y a la señorita Frost, la maravillosa bibliotecaria del pueblo, quien acaba convirtiéndose en su cómplice en un mundo hostil. A medida que avanzan los cursos escolares, y mientras se convierte en escritor, Billy se embarca en la búsqueda de su identidad sexual: ¿es posible que le guste el chico más canalla de la clase y, al mismo tiempo, la despampanante bibliotecaria? ¿Existen personas como él? Entretanto, aumentan sus deseos de conocer a su verdadero padre. Tardará toda una vida en dar con él, y será en Madrid.