El fenómeno de la desinformación ya no es un mero fantasma dispuesto a volcar su saco de incertidumbre en momentos puntuales de confusión general, sino una espesa sombra decidida a echar raíces en la sociedad digital actual, amenazando los sistemas políticos democráticos y nublando la credibilidad de los medios de comunicación que los sostienen.
Las alarmas han saltado, suscitando la necesidad de emprender una lucha ferviente para mitigar los efectos de este malintencionado patrón comunicativo que puede poner en jaque mate el derecho a la información veraz del que gozan los ciudadanos respecto a hechos de relevancia pública.
Las iniciativas periodísticas de fact-checking han abordado la pugna desde dos vertientes:
—una labor de verificación de contenidos tanto en los medios de comunicación tradicionales como en redes sociales, y
—una tarea de alfabetización mediática.
«Narrativas digitales contra la desinformación» presenta los resultados de un estudio que ofrece al lector diferentes análisis del fenómeno de la desinformación, el papel esencial de los fact-checkers y las herramientas necesarias para enfrentarse con seguridad al engranaje informativo y de contenidos.