Un chico vuelve al pueblo tras una llamada donde le dicen que su abuela está ingresada en el hospital. Allí pasará tiempo con su familia y dos de sus amigos de la infancia. Durante los días en el hospital, las discusiones se amontonarán, como también lo harán los recuerdos de su vida en el pueblo antes de mudarse a la ciudad: las fiestas, las desilusiones, las cosas que no se dicen. Su regreso está repleto de capas de silencios tras los que crecen violencias familiares, ausencias y desapego.
La vejez, la enfermedad, la muerte, la precariedad y la sangre recorren las páginas de este libro mezclándose con el léxico compartido y el folclore rural.