Toyono, Hana, Fumio y Hanako. Cuatro generaciones de mujeres y una única constante en sus vidas: el fluir de las aguas de un río que las ha visto nacer, crecer y convertirse en esposas, madres, abuelas... y a las más jóvenes también en mujeres trabajadoras.
En su viaje hacia el océano, el Ki —corto, vertiginoso y ancho como la mayoría de los ríos nipones— atraviesa un paisaje de montañas y pueblos, presas y arrozales donde imperan las leyes y costumbres del Japón más tradicional. Entre finales del siglo XIX y mediados del XX, casi sesenta años de historia quedan fijados en las delicadas páginas de esta bellísima saga familiar: el fin de la era Meiji, la guerra sino-japonesa, la Segunda Guerra Mundial y su devastadora estela... Grandes acontecimientos que van dejando huella en la vida cotidiana de estas cuatro mujeres, divididas entre la tradición y la modernidad, cuyas historias y decisiones conforman un retrato elegante y certero de la situación de la mujer en Japón.
Una novela sobre la sabiduría, el amor, el legado, las tragedias y la emancipación, los modelos que queremos perpetuar y los que es necesario abolir.