Nos consideramos “una fuerza beligerante, polémica”, como escribió Mariátegui con motivo de la fundación de Amauta, al tiempo que apostamos al pluralismo y al debate abierto y libre de dogmatismos. El compromiso con la renovación conceptual del socialismo significa dejar de lado toda “veneración supersticiosa del pasado”. Sólo así, es posible abordar con honestidad los problemas teóricos y políticos de nuestro tiempo y aportar a la construcción de una política emancipatoria para el siglo XXI. “He aquí una misióndigna de una generación nueva”.