"Historia del nombrar" desborda los límites disciplinares a que nos tiene acostumbrados el discurso académico. Texto filosófico, no duda en utilizar, sin embargo, los recursos de la historia del arte y la crítica literaria, la crítica bíblica exegética o la teoría del significado con el fin de aproximarse de forma radical a su tema central: la identidad del presente, el rostro ético del presente. La pregunta por la identidad -¿cómo construimos nuestra identidad y cuál es su pertinencia ética?-, a la vez que exige el concurso de varias disciplinas, implica una interrogación por el presente y por la forma en que llegó a ser tal. "Historia del nombrar" delimita el espacio teórico que hace posible esa pregunta.