La novela realista y naturalista decimonónica quedó fascinada por la histeria y la representó a través de múltiples y complejas heroínas encorsetadas en un papel de mujer trastornada.
Este libro indaga en los orígenes del estrecho vínculo mantenido a través de los tiempos entre locura y mujer, para comprender mejor la realidad de un siglo XIX que construyó la imagen femenina desde su categorización de histérica.
Los ejemplos aquí tratados nos recuerdan la incomprensión a la que tuvo que sobrevivir el alma femenina en el Ochocientos y las consecuencias que ello tuvo sobre la imagen de la mujer en la iconografía y la literatura.