La publicación de El moderno sistema mundial supuso el comienzo de una verdadera revolución en la historiografía y un fuerte impulso al renacimiento de la sociología histórica. Más allá de las discrepancias y las polémicas a las que ha dado origen, esta obra es ya un clásico que constituye un ambicioso intento de reconstruir la historia de la actual sociedad capitalista partiendo de una perspectiva global.Su argumento central es que el moderno sistema mundial toma la forma de una economía-mundo capitalista, que tuvo su génesis en Europa en el siglo XVI e implicó la transformación del modo de producción feudal en un sistema social cualitativamente diferente. Desde entonces, esta economía-mundo se ha extendido geográficamente hasta abarcar todo el globo, ha seguido un modelo cíclico de expansión y contracción y una localización geográfica variable de los papeles económicos, y ha sufrido un proceso de transformación secular que está aún en marcha. Este tercer volumen abarca la segunda era de la gran expansión de la economía-mundo capitalista, de 1730 a 1850. En él se estudian la llamada revolución industrial inglesa y la revolución de independencia de los países sujetos hasta entonces a la corona española, en función siempre del desarrollo de la moderna economía burguesa. Estos acontecimientos representan un fortalecimiento y una consolidación del sistema capitalista mundial, en el que se suprimen las fuerzas populares y su potencial queda constreñido a las futuras transformaciones políticas: habrá que esperar al siglo XIX para presenciar cómo esas fuerzas populares constituyen toda una nueva estrategia de lucha.«Un trabajo visionario []. Una de las declaraciones teóricas más importantes sobre el desarrollo desde la época de Weber.»Contemporary Sociology«Las claras exposiciones históricas, sociológicas o políticas de analistas como Eric Hobsbawm, Vicenç Navarro, Immanuel Wallerstein, José Manuel Naredo, Slavoj Zizek, Zygmunt Bauman o Terry Eagleton, por nombrar los más conocidos, no aparecen, como debieran, en el paisaje libresco cotidiano. » El País, 2009