Escribir sobre diversidad corporal, compartir esos saberes críticos que ponen continuamente en jaque el imperio de la norma es la tarea que encara este trabajo pionero en el activismo gordo en castellano. Interrumpir el juicio y desmentir la impasibilidad de la condena, es arremeter contra un mundo que busca eliminarnos sin dejar rastros. La politización escritural de los cuerpos gordos desafía así el estado “natural” de las cosas, allí donde las únicas marcas posibles parecieran ser el registro vigilante de las calorías consumidas entre el desayuno y la última colación a la noche...