¿Podemos imaginar y poner en práctica un autogobierno de los recursos colectivos necesarios para la vida? Además de los conocidos comunes tradicionales (bosques, acequias o pesquerías) los entornos urbanos también se han vuelto espacios de producción del común en ámbitos como la vivienda, la energía, el agua, los centros sociales, la salud comunitaria, la soberanía alimentaria o las herramientas digitales. Este libro presenta experiencias, llevadas a cabo recientemente en ciudades españolas y de Italia, donde se está pensando cómo rearticular y reformular la esfera de la reproducción social desde la escala local. Impulsar este devenir-común de lo público implica recuperar el potencial emancipador de las herramientas jurídicas que dan forma y acompañan los comunes urbanos emergentes. Más allá de la gestión de recursos concretos, estas iniciativas son, ante todo, procesos políticos que pueden transformar las reglas del gobierno colectivo. Estos "códigos comunes urbanos" representan un nuevo paradigma urbano capaz de confrontar los cercamientos privatizadores que acaparan los recursos colectivos y superar los