Un 95 por ciento. 30 años se han cumplido ya de ese paro histórico, de la convocatoria de huelga más exitosa de toda nuestra historia. España entera se paralizó. Las calles se vaciaron. La televisión, tras una cuenta atrás, se fue a negro. Fue un éxito sin precedentes y un duro golpe para el gobierno de González, que, con la promesa de la "modernización" parecía haberse sumado a la deriva neoliberal. El detonante fue un plan de empleo juvenil que pretendía imponer a los jóvenes contratos temporales sin causa y altamente bonificados, por lo que el coste para la empresa era mínimo, pero muy elevado para el erario público.