Peter Weiss hizo este drama propio, en homenaje a Franz Kafka, cuando ya le quedaba muy poco tiempo de vida, a los pocos años de haber hecho él mismo una adaptación teatral de la famosa novela "El proceso". La lectura actual de este nuevo proceso es un placer, pero tambien puede formar parte de ese homenaje debido a los grandes escritores revolucionarios, como Peter Weiss.

Esta obra se encuentra entre la media docena de las obras maestras de la narrativa europea durante el siglo XX, lo que no es poco decir en una centuria en la que se han producido novelas como las de Joyce, Faulkner, Kafka o Proust. Aquí nos encontramos ante un gran fresco de la historia europea y de las esperanzas revolucionarias que han movilizado esta historia, día a día, en una situación en la que la revolución soviética y sus propósitos de revolución mundial eran una encarnación real de aquel "fantasma" que ya recorría el mundo cuando Marx y Engels escribieron el Manifiesto Comunista; y el nazismo, y la guerra española, y la II Guerra Mundial pusieron en incandescencia las conciencias de los pueblos. Peter Weiss nos dejó esta gran contribución literaria para la comprensión de un tiempo en el que las generaciones venideras tendrán que buscar las semillas de su propia situación. Magna obra desarrollada en tres partes, en más de mil páginas de una densidad extraordinaria.

Estocolmo, noviembre de 1956: el año en que las tropas del Pacto de Varsovia reprimen la rebelión en Hungría y las tropas occidentales ocupan el canal de Suez. En esta novela, descubierta hace poco entre el legado de Peter Weiss y, por tanto, publicada recientemente, el autor, en su preocupación por tomar postura ante los acontecimientos y a la vista de la situación mundial, persigue durante todo un día a escritores, actores, pintores y periodistas, quiere que analicen la situación general y, también, la personal y artística. Cada uno de ellos será zarandeado por la pregunta: ?¿Cuál es mi postura, realmente qué es lo que quiero, qué posibilidades tengo?? ¿La escritora Fanny debe separarse de su marido y vivir con el pintor Leo? ¿Cómo debe escribir? ¿Qué puede hacer el dramaturgo Paul para despertar a su público? ¿Qué experiencias del otrora redactor jefe de la República de Weimar y del exilio, emigrado de Alemania, tienen vigencia aún hoy día? Peter Weiss se apropia en esta novela, como en ninguna otra escrita en prosa, de las diversas perspectivas tomadas de personajes muy diferentes. La novela fue escrita en 1956. En ella aparecen claros y nítidos rasgos de la vida del autor, que trabaja en Estocolmo desde 1940. El pintor, cineasta, periodista, comediógrafo y novelista se encuentra, a la hora de escribir, en una situación en la que tiene que tomar determinaciones programáticas para su posterior actividad artística.