Este poema es una larga carta. Esta larga carta se ha convertido en un pequeño libro.Nunca he escrito más que libros cortos, por incapacidad de hacer otra cosa, pero quizá también por necesidad: escribir es convertir lo mucho en poco, el exceso en carencia. Ningún libro debería ser más pesado que la luz. Ninguna escritura debería hacer más ruido que una sonrisa.

Este sería un libro inútil, si la poesía, a su vez, lo fuera. La poesía es inútil y es poreso por lo que tiene utilidad, dice Christian Bobin, experto navegante de paradojas.En este libro, el autor recolecta, como un sencillo ramillete de flores, a 7escritores a los que admira. Estos siete escritores tienen en común habernacido entre el siglo IX y el XX, la mayor parte de ellos, y haber frecuentadoel ambiente literario del Paris de esa época, cuna de vanguardias y de libertadartística. Muchos de ellos han sido maestros de escritores posteriores a ellos,como lo es el mismo Christian Bobin. Escribe de ellos, pero también, a travésde ellos, nos expresa su apasionado y sencillo decir sobre la poesía, la belleza,la muerte, la propia voz, la bondad y el amor. Nos habla, al fin y al cabo, de lavida a través de la escritura, esa ofrenda luminosa de una soledad a otra.